REVOLUCIONES LIBERALES
Las naciones vencedoras de Napoleón se reunieron en el Congreso de Viena con la intención de reconstruir Europa. Estas potencias veían su triunfo como el definitivo fracaso de la revolución político-social-democrática que se había iniciado en Francia y extendido a lo largo del continente. El objetivo de las potencias europeas era volver al Antiguo Régimen con la Restauración del absolutismo anterior a 1789.
La discordancia entre el orden político llevado a cabo por las monarquías absolutas y la realidad económico-social era tan evidente que durante toda la primera mitad del siglo XIX se produce en Europa un enfrentamiento constante entre los absolutistas, que deseaban mantener la situación restituida tras la caída de Napoleón, y los que apostaban por el cambio socio-político como resultado del liberalismo.
Acontecen movimientos violentos a lo largo del siglo con la revolución absolutista y la revolución liberal, de los que tenemos ejemplos claros en las Revoluciones atlánticas y los movimientos nacionalistas de los pueblos de Europa.
De las Revoluciones atlánticas a las Revoluciones de 1848, conocida como la Primavera de los Pueblos.
Las Revoluciones acontecieron durante los primeros seis meses de 1848, se trataba de una nueva oleada de manifestaciones que tuvo gran repercusión en estados como Francia, Austria, Alemania, Hungría, Italia y diversos pueblos de Europa central. Las revoluciones de este año constituyeron básicamente una demanda de liberalización y, aunque fueron reprimidas, tuvieron gran repercusión.
RELACIÓN: AGENCIAS, GOBIERNO Y SOCIEDAD
Con la aplicación de los nuevos avances técnicos y la consolidación del nuevo sistema económico (el capitalismo); el periódico se transformó en una mercancía más, hecho que no invalida, en modo alguno, su función de guía de opinión e instrumento de propaganda ideológica (sobre todo para la clase proletaria). La gran novedad del siglo XIX reside en que en toda publicación periódica conviven dos fines: el político y el económico.
Cuando los gobiernos se percatan de la influencia que las agencias ejercen sobre las poblaciones a través de sus comunicaciones (imponen sistemas de vida, valores culturales y morales), inician un acercamiento a cambio de cierta sumisión: protección política, subvenciones, privilegios. Así las agencias se convierten en semiprivadas y los gobiernos controlan en cierta forma la información a la que el público tiene acceso.
La entrada de los gobiernos en el negocio comunicativo de las agencias alteró sus acuerdos, puesto que ellas (según el país) empezaron a respaldar los intereses de sus propios Estados. De este modo, la expansión informativa corrió pareja a la expansión colonial, y las agencias se dividieron los mercados extranjeros en zonas de influencia, de la misma forma que hicieron los gobiernos.
En 1873 acontece en Occidente lo que sería la primera gran crisis del capitalismo industrial, la ‘gran depresión’, que tiene como consecuencia baja producción, menor número de ventas de bienes de equipo, el aumento del paro, quiebras de empresas, etc.
Hacía 1896 comienza una recuperación a través del imperialismo, que tiene que ver con la expansión colonial, con la creación de mercados extraeuropeos en los que se colocarán los excedentes industriales y que supondrán materias primas baratas, la ampliación de los mercados interiores, en particular en el ámbito urbano, originando masivas ventas de bienes de consumo y los mercados específicamente de masas y el cambio de función del Estado.
CONTEXTO HISTÓRICO DE LAS AGENCIAS DE NOTICIAS
REORGANIZACIÓN INFORMATIVA
Las agencias van a organizar la circulación informativa mundial, la estructura del sistema, en base a los siguientes factores:
- Sobre una red informativa controlada y de capacidad creciente. Se proponen explotar el negocio y desarrollar el telégrafo, ‘evitando la competencia de terceros’. Acuerdan por una parte el intercambio en exclusiva de información y por otra el apoyo mutuo y colaboración en todo lo relacionado con el tema.
- Sobre centros neurálgicos de importancia graduada. París, Londres, Nueva York, por este orden y en sucesivos estratos, constituyen el centro móvil de la circunferencia informativa, que, en un eje atlántico, forma el corazón de la red informativa mundial.
- Sobre notables beneficios económicos, resultado de la explotación del servicio telegráfico y de la transmisión y venta de informaciones.
Los medios de comunicación jugaron un papel decisivo en la conformación de la ‘sociedad de masas’, ya que los periódicos supusieron desde las Revoluciones atlánticas el núcleo de las organizaciones y de la lucha políticas. Los medios impresos fueron un elemento decisivo en el proceso de reculturalización urbana y en todas las reformas sociales causadas por la industrialización y el urbanismo. Las publicaciones especializadas fueron en la segunda mitad del XIX instrumentos decisivos del desarrollo económico en la generalización de la bolsa y las finanzas, y en el imperialismo económico.
Desde las últimas décadas del siglo XIX, los medios informativos fueron responsables directos de organizaciones y movilizaciones de masas, de regímenes de masas y, en definitiva, de la ‘sociedad de masas’.
El poder de los medios de comunicación reside en el liderazgo que los grandes diarios ejercen sobre las multitudes en el cambio de siglo.